Agradecidos con el hombre que les ha brindado apoyo y comprensión, y en todo momento los ha acompañado en los momentos más importantes, Mario y Cristóbal Ramos Bauche ven a su padre ,Mario Ramos Tarriba, como un pilar fundamental de sus vidas.
“Es un ejemplo digno de admiración”, Mario Ramos Tarriba es para ellos una persona alegre, positiva y con arrojo que desde pequeños les enseño que el buen trabajo rinde frutos.
La marca Mario Ramos
Educados por su padre con la filosofía de siempre estar enfocados en la meta, los hermanos Ramos Bauche como parte del corporativo Mario Ramos y como joyeros de una tercera generación, han recibido de Mario Ramos Tarriba apoyo incondicional que les ha marcado responsabilidades y les ha inculcado el buscar siempre el crecimiento personal y laboral.
“Él siempre ha sido mi ejemplo a seguir, a veces siento que pone la Mario y Cristóbal Ramos Bauche ven en Mario Ramos Tarriba a un padre comprensivo y un hombre de objetivos vara muy alta, pero me encanta la idea de lograr superar su éxito profesional” señala Mario Ramos Bauche.
Calificado como un hombre de resultados y siempre con proyectos en la menta, Ramos Tarriba ha buscado el bienestar de su familia y su empresa con una sensibilidad y enfoque orientos a la realización de sus sueños.
“Nos ha ayudado a enfocarnos en los resultados. Mientras tú te enfoques en el resultado, los sueños van a llegar nos dice” indica Cristóbal Ramos Bauche
Unidad familiar
El ejemplo de Mario Ramos Tarriba ha dejado huella a los hermanos, en Mario el velar por todos sus hijos, el jamás hacer diferencias entre los miembros de la familia, y apoyarlos a cada uno en lo que necesiten, consciente de que son diferentes.
Y para Cristóbal es el luchar todo el tiempo por mantener unida la familia, buscar la estabilidad y el crecimiento profesional. Siempre dejar ser a sus hijos pero preocupado por su estabilidad y crecimiento profesional.
Recuerdos con huella.
Para ambos hermanos los recuerdos del trabajo duro se dieron cuando su padre los llevaba de pequeños a la joyería que tenían en el centro. Memorias de ver el trato de su padre a los clientes, el acomodar las vitrinas y la diversión de los primeros pininos en el mundo joyero, estarán siempre en su memoria.