Siendo su clínica su segundo hogar, sitio donde se rodea de personas muy capacitadas en sus áreas, Jacqueline Cutiño Robles, odontóloga en Clínica Biomédica Chapultepec, siempre trata de hacer su labor con esmero y paciencia. La clave de su éxito consiste en crear un vínculo empático con el paciente.
¿Cómo recomendaría a otros buscar el éxito?
Trabajando y esforzándose todos los días, no perder el tiempo en cosas banales, porque el tiempo es el tesoro más preciado que ya no regresa y tratar de ser felíz con lo que se tiene.
¿Qué tendencias observa actualmente en su campo?
Veo que las personas poco a poco están creando más conciencia del cuidado bucal, pero desgraciadamente se sigue al dentista muchas veces cuando “duele” . Es una labor de todos nosotros como profesionales de la salud, crear conciencia a la población en revisiones periódicas. “El dentista no duele, el descuido sí”.
¿Qué consejo le daría a los futuros odontólogos?
Esta carrera es muy noble pero no hay que descuidarse ni dar por sentado que lo sabes todo, siempre tienes que seguir estudiando nuevas técnicas, nuevos materiales y tratar de mejorar día con día.
Anécdota
Un trabajo que la marcó, tanto por desarrollarse en ese sector por 10 años como ser una experiencia única, fue laborar para la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal. Esta etapa la inició al salir de la universidad y la formó en carácter, ya que no solo veía dientes sino a lesionados que acudían por algún tipo de traumatismo.