Ante el estado de emergencia financiera de las empresas de Sinaloa, distintas instituciones bancarias buscaron crear soluciones para ayudar ante la contingencia económica. El Centro Bancario de Sinaloa no se quedó atrás y desde el 17 de marzo se anticipó y en conjunto con todos los bancos emitieron y publicaron acciones para salvaguardar la salud de sus cliente y colaboradores.
Alberto Aguilar Trava, presidente del Centro Bancario de Sinaloa, recalca que se dieron a la tarea de utilizar todos sus recursos digitales, de infraestructura y equipos de trabajo, para asesorar y apoyar a todos sus clientes con créditos para diferir sus pagos con varios meses y disponer de todos los servicios financieros y productos requeridos.
¿En qué áreas se van a concentrar los esfuerzos en el proceso de reactivación?
Ya que tenemos más información de cómo se han venido comportando los portafolios de crédito, nos apoyamos mucho en el programa Impulso. Programa en coordinación con cada uno de los gobiernos de los estados y Nacional Financiera, que crearon una bolsa de recursos para otorgar créditos a la PYME, con tasa preferencial, sin comisión, y con el aval y respaldo de Nacional financiera.
Adicionalmente, en todos los sectores de la economía, en especial las actividades no esenciales, establecimos una siguiente fase de apoyos, para dar plazos más largo de pago, periodos de gracia, para que las empresas puedan planear su reactivación con mayor margen de maniobra financiera con sus créditos bancarios.
¿Qué fortalezas tiene la banca hoy en día, con respecto a otras emergencias financieras?
Aparte de los indicadores de capital, liquidez, de fortaleza de la banca, la era digital que esta viviendo la banca, nos permitió actuar muy rápido, muy ágil, con todos nuestros clientes, la ABM , y las autoridades financieras al emitir las disposiciones para que los bancos pudiéramos actuar es muy importante, por que, apoyamos a todos los sectores comerciales y personas físicas.
Alberto Aguilar Trava apunta que “establecimos una FASE 2 de apoyos para dar plazos de 2,4,6 y hasta 7 años de pago, incluyen periodos de gracia a capital, “algunas actividades no lo han requerido, pero es indispensable que todos los clientes tengan un esquema para apoyar su capacidad de
pago actual”.