Como Director Ejecutivo de Operaciones de Wholesum, Theojary Crisantes tiene claro que la misión de la compañía no estriba únicamente en producir. La esencia de la firma sinaloense radicada en Estados Unidos consiste en llevar a los comensales productos sanos, inocuos y frescos, procurando siempre una producción sostenible y sustentable, buscando nulo impacto negativo en el medio ambiente.
Una persona empática y analítica, con alto sentido de compromiso con la empresa y con su familia, Theojary Crisantes es parte de la tercera generación de la compañía pionera en la producción de alimentos orgánicos. Y es que tal y como consta en los libros de los hombres ilustres de Sinaloa, su padre Theojary Crisantes fue quien decidió innovar en el agro y, hace más de tres décadas, comenzó en la entidad la implementación de la agricultura orgánica.
Una empresa diferente
Wholesum es una empresa alejada de la agricultura convencional, que tiene como uno de sus cimientos la clara definición de roles, aspecto que, a juzgar por el director ejecutivo de operaciones, ha contribuido a darle permanencia en el mercado. En ese sentido, relata: “Nos ha ayudado mucho a nosotros como una empresa familiar que ha evolucionado, el orden interno entre los socios, tener una buena definición de cuáles son los roles y cargos de cada uno de aquellos que formamos parte de la empresa, incluso miembros de la familia. Cuando no hay un orden establecido se generan una serie de problemas”. Desde el punto de vista técnico, comparte que “en la empresa le hemos apostado mucho al tema tecnológico para todos los procesos productivos. Tratando de hacer y tener un mejor control de todas las etapas en la producción”.
Presente y futuro del agro
Como experto en la agricultura, refiere que tanto la agricultura convencional como la orgánica “tendrá que estar muy basada en la sustentabilidad. La agricultura depende mucho de los recursos naturales, lo cual hace muy importante que pensemos en la sustentabilidad”, puntualiza. Aunado a lo anterior, recomienda que los agricultores necesitan ser más eficientes y no caer en la sobreproducción, ya que eso va en detrimento de los productores y, paradójicamente, de los consumidores. “Hay muchos alimentos y muchas personas que los necesitan, pero lo difícil es encontrar un balance, para que llegue a las personas adecuadas”, recalca.
El director ejecutivo de operaciones hace hincapié en la evolución que ha tenido el mercado, al indicar que “en el pasado las expectativas del consumidor eran muy simples, pero el día de hoy ya es muy sofisticado. Todas las nuevas necesidades que debemos tomar en cuenta. De manera que tenemos que conocer realmente a los consumidores y saber cuáles son sus necesidades para poder estar alineados entre las expectativas de lo que nosotros estamos produciendo”.
Respecto a la innovación tecnológica, señala que en Wholesum ya “tenemos contacto con compañías que están haciendo sistemas de predicción de producción, proyección de cosecha. El día de hoy está basado en la observación pero ya hay compañías que están haciendo modelos computacionales para proyecciones más precisas. El tema de la robótica va avanzando a pasos agigantados porque nos hemos dado cuenta que la mano de obra no es infinita. Hay poca mano de obra, entonces definitivamente la robótica está avanzando. Hay muchos temas tecnológicos que se han estado implementando o que están en evaluación, como los de control del comportamiento de las plantas, interacción de las herramientas de producción con el desarrollo de las plantas. La tecnología está creciendo a pasos agigantados”, sostiene.