La llamada recesión silenciosa que se vive en los Estados Unidos mantiene estancadas las ventas de casas y condominios en Rosarito.
Gustavo Torres Ramírez, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE) en la localidad, señaló a medios de comunicación que de los meses de marzo a mayo el mercado inmobiliario ha registrado pocas ventas, pero se espera que al final de este año el sector se reactive, ya que muchos de los inversionistas están esperando a que bajen las tasas de interés para adquirir propiedades.
Otros factores que intervienen para incrementar las ventas, tienen que ver con los cruces fronterizos, el mal clima que se ha presentado en estos meses del año y las extorsiones policiacas que ahuyentan a los inversionistas.
Incluso el precio de las propiedades que se ubican cerca del mar y que son valoradas, disminuyeron su costo en al menos un 3 por ciento, en comparación con el año anterior, ante la oferta y la demanda.
Aun así, las expectativas son buenas ya que en Rosarito se construyen tres proyectos habitacionales, uno de ellos con inversionistas de Querétaro, que adquirieron 20 hectáreas de tierra y están vendiendo lotes con todos los servicios y además seis lotes para construir casas y torres de condominios.
Además, en el kilómetro 36 de la carretera libre Rosarito-Ensenada, se construye la Torre 51, con más de 90 unidades y en el fraccionamiento que anteriormente era La Elegancia, se construyen casi 100 condominios y un hotel de marca, además los inversionistas compararon un terreno aledaño donde construirán un centro de convenciones, no muy grande, pero que tendrá vista al mar.
Un condominio frente al mar hace tres años costaba 250 mil dólares, un año después subió a 350 mil dólares y ahora su valor es de alrededor de 330 mil dólares, lo que demuestra que las propiedades han bajado su valor comercial.