Impulsa Inmuebles celebró su 35 aniversario con un evento realizado en el Hotel Marriot de Culiacán, en el que se reunió a colaboradores, directivos y fundadores de la empresa.
La celebración inició con la bendición del sacerdote Javier Plata. Posteriormente el director general, Ricardo Clouthier Carrillo, recordó sus inicios en la compañía, primero como inversionista en un proyecto de Culiacán y luego como integrante del equipo, hasta asumir la dirección en 2008.
Mencionó que, a lo largo de su historia, la empresa ha enfrentado diversos retos, crisis financieras y cambios en el mercado inmobiliario, y destacó las acciones recientes para adaptarse a un entorno económico complejo, como el ajuste de estructura organizacional, la adecuación de productos a la demanda, el control de gastos y la venta de activos no prioritarios.
Ricardo Clouthier destacó a los asistentes los principios que guían a la empresa, como la calidad por encima de la cantidad, la rentabilidad sostenible, la generación de valor a largo plazo y la confianza con todos los actores involucrados. Reconoció especialmente a los colaboradores de larga trayectoria por su compromiso y sentido de pertenencia.
“Cumplir 35 años no es solo mirar hacia atrás, es también detenernos un momento para reflexionar con honestidad. Hemos cometido errores, hemos enfrentado tiempos complejos, pero nunca hemos dejado de aprender”, expresó Ricardo Clouthier.
Por su parte, el presidente del Consejo de Impulsa, Manuel Clouthier Carrillo, hizo un recuento de las crisis económicas vividas en México desde la década de 1980 y resaltó que la vida empresarial es cíclica, con periodos de bonanza y de dificultad. Señaló que el trabajo de Impulsa busca no solo desarrollar proyectos inmobiliarios, sino también contribuir a la calidad de vida de las comunidades y a la mejora del entorno urbano.
“No construimos casas, no vendemos ladrillos. Son proyectos que tienen un carácter que buscan precisamente incidir en la forma de vivir de la gente”, compartió Manuel Clouthier.
La jornada incluyó servicio de bebidas y snacks, así como una taquiza de carne asada y el tradicional corte de pastel. También se entregaron reconocimientos a empleados con 5, 10, 15, 20, 25 y 35 años de antigüedad. El evento concluyó con un llamado a mantener el esfuerzo colectivo, la confianza y la capacidad de adaptación para los retos futuros.