Mientras el país duerme, la logística sigue activa. En México, más de 16,700 rutas se han ejecutado en horario nocturno, entre las 22:00 y las 05:00 horas, en lo que va del año.
De acuerdo con datos de SimpliRoute, publicados por México Industry, aunque el volumen total sigue siendo menor que en el horario diurno, esta modalidad ya es un fenómeno operativo consolidado, especialmente en retail, transporte, consumo masivo e industria manufacturera.
Los porcentajes
El sector retail concentra más del 53 por ciento de todas las entregas nocturnas en el país. Le siguen transporte (13.3 por ciento) y consumo masivo (21.5 por ciento), una señal clara de que las grandes operaciones han trasladado rutas estratégicas al turno más silencioso, pero también más riesgoso.
Realizar operaciones logísticas en horarios no convencionales permite reducir tiempos, evitar el tráfico y optimizar costos, pero también plantea nuevos desafíos en materia de seguridad y control.
Según expertos, con herramientas tecnológicas y planificación adecuada, las empresas pueden gestionar lo que esta operación implica.
Entre los beneficios de operar de noche están evitar el tráfico, agilizar entregas en zonas urbanas congestionadas y aprovechar activos de forma más intensiva. Las grandes flotas, especialmente las del segmento SuperCorporate, con más de 253,000 rutas anuales, han migrado parte de sus entregas a la madrugada.
Según SimpliRoute, esta estrategia debe ir acompañada de automatización y monitoreo inteligente, no solo de más operación.
La logística nocturna no es solo mover paquetes en silencio, es tomar decisiones en segundos. Ahí es donde entra la inteligencia artificial como una capa crítica para prevenir, detectar y reaccionar a tiempo, señala el reporte.
Aunque solo el 3.5 por ciento de las rutas de los grandes corporativos se realizan de noche, esto representa miles de operaciones que no pueden fallar en costo, trazabilidad y seguridad.
La logística nocturna dejó de ser una táctica para flotas pequeñas. Hoy es un campo de riesgo y eficiencia donde se juegan decisiones estratégicas, reputación de marca y rentabilidad operativa.