José Luis y Mauricio Ávila están al frente de la cerveza artesanal Ocotillo, lanzada oficialmente en 2011.
Cada una de las etiquetas de Ocotillo busca evocar los ayeres del estado de Sonora y resaltar su sabor con ingredientes regionales.
Como resultado de un estudio de mercado, la primera cerveza en salir fue la Güera, estilo light hybrid, que está compuesta con 80 por ciento de malta normal y 20 por ciento de trigo.
De acuerdo con José Luis Ávila, con esta etiqueta se recuerda cuando los abuelos se reunían en familia a beber cerveza y comer carne asada.
Posteriormente, sacaron la Colorada, una irish red, a la cual, durante el proceso de eleboración, se le agrega piloncillo de Ures.
“Es una cerveza roja, con la que quisimos imitar los atardeceres de Sonora, que son rojizos”, explica José Luis.
Para hacer alusión al invierno y a los momentos en que la gente de los pueblos toma café o chocolate caliente, se creó la etiqueta Morena, una cerveza estilo chocolate milk stout, la cual es resultado de la mezcla de chocolate orgánico de Oaxaca, leche y café.
Además de esas tres etiquetas, Ocotillo lanzó una cerveza de raíz, o root beer, sin alcohol, hecha cien por ciento de manera natural, con ingredientes como vainilla, zanzaparrilla y anís.
MERCADO EN CRECIMIENTO
Abrirse camino para la venta y distribución no ha sido fácil, cuenta José Luis.
“Cuando empezamos, era difícil que los bares nos abrieran las puertas, pero el mercado ya está creciendo mucho”, menciona.
Esta apertura tiene mucho que ver también con el cambio de paradigma en los mismos consumidores, agrega, los cuales buscan ahora disfrutar nuevos sabores y más calidad, en vez de cantidad.
“En un principio, la gente le tenía miedo a la cerveza artesanal. Ahora la exigen, y eso nos ayuda a tener presencia en más bares y restaurantes”, asegura.