El 80 por ciento de los asociados de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) delegación Tijuana son empresas pequeñas y medianas, que se ven principalmente afectadas ante la llegada de constructoras externas.
“Tenemos empresas que vienen de la Ciudad de México, o de otros estados de la República a invertir a Tijuana, pero además tenemos constructoras que vienen a hacer las obras, entonces afectan al gremio”, explicó a medios de comunicación Jorge Núñez, secretario de la CMIC en el municipio.
Ante esta situación, ha habido cierres de negocios.
Apuntó que otras de las acciones que perjudican a la industria de la construcción local es que sea la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), la encargada de las grandes obras federales que están siendo edificadas en la ciudad, como el viaducto elevado.
“Son situaciones que no son parejas para los constructores, porque no tienen las mismas obligaciones que nosotros”, resaltó.
Estas inversiones realizadas por la Sedena son importantes para la ciudad, además del desarrollo que generan, pero mencionó que se debería de considerar a la proveeduría local, tanto de constructoras como de materiales, sean tomadas en cuenta para ser beneficiados.