En los distintos museos del mundo, uno de los servicios fundamentales que ofrecen a sus visitantes son los del área educativa. Estos espacios en específico son los encargados de diseñar y poner en práctica diversas actividades, la mayoría de ellas lúdicas, para lograr acercar al público que visita el museo con las piezas de arte en exhibición y construir un puente de entendimiento y conocimiento. Son la parte que brinda la educación no formal, la cual es sumamente importante tanto como la que se imparte en las escuelas. Y para que esto funcione basta con que se programen grupos escolares que asistan al museo, donde los alumnos son atendidos por guías o mediadores, quienes poseen una instrucción especial para atender a diversos tipos de público.
Estos profesionales son los encargados de dar la bienvenida, comentar, dependiendo del lugar, la historia del lugar que alberga al museo, guiar por las salas de exhibición al grupo, explicándoles las piezas y comentando información acerca de la vida de los autores de las obras. Una vez que se termina el recorrido los dirigen a un sitio especial, destinado para que realicen los estudiantes una serie de actividades de lo visto en las salas.
Para ello se diseñan tareas específicas, con la finalidad de despertar la imaginación y creatividad de los alumnos, reforzando los temas vistos para conseguir el anhelado propósito de un real acercamiento con el arte. 
Vivir experiencias de este tipo puede ser detonante para descubrir una verdadera vocación hacia las artes visuales. Despertar en los alumnos ese gusto o interés por querer estudiar pintura, dibujo, fotografía, arquitectura, porque se dan cuenta que, al realizar estos trabajos plásticos, se desarrolla un sentimiento de bienestar e identificación, un medio de expresar ideas, un despertar de la sensibilidad para la creación.
Esa es la importancia que tienen los servicios educativos de los museos, aproximar a las personas con las diferentes manifestaciones del arte, y de esta manera, generar en los visitantes sensaciones de disfrute estético, momentos de goce, de aprendizaje, así como también los convoque a pensar y reflexionar sobre todo lo que les rodea y atañe.
