Francia se ha consolidado como el segundo mayor inversionista extranjero en el sector aeroespacial mexicano, con una inversión acumulada cercana a los 280 millones de dólares.
Delphine Borione, embajadora de Francia en México, señaló a medios de comunicación que esta colaboración no se limita a los recursos económicos, sino que incluye el fortalecimiento de las capacidades locales mediante alianzas estratégicas con universidades.
“Estamos formando capital humano calificado que podrá liderar el desarrollo tecnológico del futuro”, afirmó.
Según el portal México Industry, en el sector aeroespacial mexicano destacan empresas francesas como Safran y Thales, líderes globales en tecnología, innovación y empleo.
Estas compañías han sido clave en la expansión de la industria, aportando no solo tecnología avanzada, sino también programas de capacitación y desarrollo profesional.
Safran
Con 34 años de operación en México, Safran emplea aproximadamente a 14,000 personas en 20 instalaciones distribuidas en cuatro estados.
Anne-Florence Copin, directora de desarrollo corporativo, señaló que el 25 por ciento de la fuerza laboral aeroespacial en México pertenece a Safran.
“Nos comprometemos con la innovación, la excelencia y el desarrollo profesional de los mexicanos”, destacó.
Entre las inversiones más destacadas se encuentran:
-Querétaro: Producción de piezas para motores CFM56 y LEAP, con una inversión de 35 millones de dólares en una nueva línea de ensamblaje. Además, la empresa construye un centro de mantenimiento, reparación y revisión (MRO) con una inversión de 80 millones de dólares, que generará 500 empleos directos para 2026.
-Chihuahua: Inauguración de una planta con inversión de 7 millones de dólares, dedicada a la fabricación de sistemas de evacuación y componentes eléctricos para aeronaves, con un incremento del 40% en su capacidad productiva.
Además de su enfoque en la producción, Safran impulsa la investigación tecnológica y la formación de talento especializado, con proyectos conjuntos con universidades mexicanas en áreas como propulsores iónicos y sistemas de navegación inercial.
Thales
Por su parte, con más de 1,300 empleados y dos plantas en México, Thales opera 25 de las 28 estaciones de radar y suministra equipos para los principales centros de control aéreo en Ciudad de México, Monterrey y Mérida. Actualmente, el 100 por ciento del espacio aéreo mexicano se gestiona con sistemas de la compañía.
“Nuestros sistemas TopSky, de nueva generación, optimizan rutas, previenen conflictos entre aeronaves y reducen el consumo de combustible, apoyando metas de sostenibilidad y eficiencia en el sector”
Jerome Copin, director del Centro de Competencias y Soluciones de Movilidad en el Espacio Aéreo de Thales para Latinoamérica.
A nivel global, las soluciones de Thales gestionan el 40 por ciento del espacio aéreo, consolidando su liderazgo en tecnología para aviación. El auge de drones ha creado la necesidad de sistemas especializados. Thales desarrolla tecnologías para registrar rutas de drones colaborativos y proteger infraestructura crítica contra drones no autorizados.
“Hemos implementado soluciones en grandes eventos internacionales que monitorean y controlan estas nuevas dinámicas del espacio aéreo. La región debe prepararse para integrar estos elementos sin afectar las operaciones tradicionales”, señaló Jerome.
La compañía también destacó sus esfuerzos en ciberseguridad, con una inversión superior a 7,000 millones de dólares en la última década. Thales lidera proyectos de auditorías, capacitación y desarrollo de soluciones para proteger sistemas críticos en aviación.
Sector en crecimiento
Con un sector aeroespacial en crecimiento, México se perfila como un hub estratégico en Latinoamérica. En 2023, Thales creó el Centro de Integración y Servicios para la Gestión de Tráfico Aéreo en Ciudad de México, desde donde brinda soporte a toda la región.
“La clave está en el talento mexicano. México tiene universidades especializadas y profesionales que lideran proyectos no solo a nivel local, sino también en América Central y Sudamérica. Nuestro objetivo es seguir invirtiendo en capacitación y en soluciones que refuercen la posición estratégica del país en el sector aeroespacial”, puntualizó Jerome.
A pesar de los avances, persisten retos relacionados con la infraestructura, la formación de talento altamente especializado y las condiciones regulatorias para fomentar un entorno más competitivo. Sin embargo, el dinamismo del sector y el compromiso de las empresas francesas sugieren un panorama prometedor.
Francia y México están construyendo un modelo de cooperación que combina inversión, transferencia tecnológica y desarrollo humano, consolidando al sector aeroespacial como una pieza clave del crecimiento económico y tecnológico de ambos países.