Grupo Pescados Industrializados (Pinsa), empresa líder de la industria atunera en América Latina, dio a conocer el exitoso protocolo implementado que le ha permitido evitar el contagio del SARS-CoV-2 entre sus trabajadores destacando la operación de filtros sanitarios para la detección de casos sospechosos de COVID-19, la sana distancia en los procesos industriales, estrictos controles de higiene y sanitización así como la capacitación permanente de su personal como un agente de prevención social del virus.
El comisionado estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios de Sinaloa (Coepriss), Jorge Alan Urbina Vidales y José Eduvigildo Carranza Beltrán, presidente de Grupo Pinsa, se reunieron con sus respectivos grupos de trabajo para abordar la estrategia sanitaria que diseñó esta empresa ante la pandemia del COVID-19 y lograr que los procesos industriales sean más seguros. “Incluso la empresa ha anticipado que estas medidas se mantendrán mientras no exista vacuna contra esta enfermedad”, comentó Urbina Vidales.
“Hemos trabajado en coordinación con la Secretaría de Salud con el respaldo de Coepriss y cumpliendo las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), implementando acciones que se han demostrado efectivas a nivel internacional. Contamos con una guía de prevención y los protocolos para que los empleados sean puestos en cuarentena por recomendación de las autoridades sanitarias, de manera voluntaria o cuando sean diagnosticados con el nuevo coronavirus”, explicó Carranza Beltrán.
Urbina Vidales destacó los tres ejes principales que distinguen la estrategia de Grupo Pinsa. En primer término, dijo, destacan los estrictos filtros sanitarios en los accesos de la empresa en los que se toma la temperatura de cada trabajador, se observa la sintomatología en caso de existir sospecha de algún padecimiento respiratorio y se aplica desinfectante. Esta medida va de la mano de las medidas de higiene y sanitización permanente de las diferentes áreas de la empresa.
El segundo eje, explicó, es la significativa reducción de las concentraciones laborales ya que la empresa aplica la política de la sana distancia en todos sus procesos industriales, además de la suspensión de las actividades no esenciales.
El tercer punto es la capacitación a todo el personal para prevenir el COVID-19 con una campaña de comunicación y señalización en la que destaca un sistema de información a través de un sonido integral, al interior de los procesos, donde se instruye a todo el personal sobre las buenas prácticas de higiene y medidas de prevención para replicar estos datos en su familia, en su entorno y con la sociedad en general.
Para reforzar esta estrategia Grupo Pinsa elaboró materiales con un equipo experto y multidisciplinario que no solamente colocó en puntos clave de la empresa sino que compartió con la población para combatir la propagación del COVID-19 no solo en México sino en el mundo. “Lo más importante es que a petición de Grupo Pinsa los verificadores de Coepriss revisan la empresa de manera permanente para realizar observaciones que permitan dar seguimiento y mejorar estos protocolos”, precisó.