Los altos niveles de estrés y presión son factores que impiden un mejor rendimiento de los colaboradores de la empresa, desde el directivo con más experiencia hasta el empleado de recién ingreso. Por eso es importante que las compañías fortalezcan la inteligencia emocional de sus integrantes, sostuvo Patricia Figueroa Castro, directora de Más Nivel. Puntualizó que el alto rendimiento y los mejores resultados en una organización se logran de mejor manera si se identifican, comprenden y regulan las emociones propias y de los demás.
Metodología para el desarrollo profesional
Para ello, abundó la especialista, primeramente debe haber una conciencia de sí mismo, es decir, saber cómo estamos, si existe mucha presión, el cuerpo lo somatiza, por lo que manejar las emociones influye la eficiencia en el trabajo. De manera que debemos sabernos “leer el cuerpo”.
Asimismo, explicó que el desarrollo profesional de las personas no solamente se logra con capacitaciones técnicas, sino mediante la autogestión de las emociones. La clave no consiste en reprimir o dejar de sentirlas, sino en manejarse de mejor manera, “ya que las emociones se contagian a los colaboradores”.
Patricia Figueroa añadió que la adaptación a los cambios, orientación a los logros y una perspectiva positiva son aspectos fundamentales para que los colaboradores de las empresas tengan un mejor desempeño, que redunden en beneficios tanto para la compañía como personales. La directora de Más Nivel recalcó la importancia del factor humano como base para la obtención de mejores resultados en una empresa, lo cual se logra mediante la empatía entre los colaboradores, conciencia de organización, trabajo en equipo y liderazgo inspiracional.