Dando sus pininos en la empresa familiar, fundada por su abuelo, Ahiko E. Kuroda Morán en conjunto con sus hermanos y primos son la tercera generación al frente de la reconocida empresa sinaloense Kuroda. En unión han logrado llevar la dirección de las tiendas más allá de solo salas de exhibición y convertirlas en oportunidades diarias.
Aunque la hoy directora comercial no planeaba trabajar en el negocio familiar, en sus prácticas comerciales hubo algo que la enganchó y hoy recalca la importancia de brindar el mejor servicio al cliente y que se vaya feliz con su compra.
Kuroda Morán ha tenido errores y de ellos ha aprendido, recalca. Para que una empresa funcione debe ser avalada por todos y no por un departamento, de esa manera las decisiones siempre llevarán a la empresa a una dirección correcta. “Se vale ser un poco soñador y muy trabajador. No importa lo que se atraviesa, se quita y continúa, pero con más ganas”, señala la directora comercial.
En estos tiempos, ser emprendedor significa no distraerte ni envolverte en las situaciones de estrés o negativismo, básicamente es ponerte unos visores y quitar todo eso para poder encontrar soluciones nuevas, considera Ahiko Kuroda Morán.