El Mundial está en boca de todos, literalmente. Se calcula que la mitad de la población mundial, aproximadamente 3.4 billones de personas, sean parte de la audiencia de este importante torneo. Y, específicamente, se espera que la región Latinoamericana sea aquella que tenga más espectadores, a comparación de otras como Europa, Asia-Pacífico, Medio Oriente y África[1].
Y, si a esto se suma el hecho de que, gracias a la tecnología, un estimado de 280 millones de personas a nivel mundial vean en línea o a través de dispositivos móviles la justa deportiva, multiplica en gran manera el impacto que tendrá en personas de todas las edades.
Debido a esto, la fiebre mundialista puede que preocupe a líderes organizacionales al considerar que puede ser una distracción para los colaboradores, poniendo en riesgo la operación diaria, la productividad y los resultados del negocio durante prácticamente, un mes.
Y, estas preocupaciones tienen algo de cierto. Se estimó que las personas con un empleo que vieron la copa del Mundo 2010 en horas laborales pudieron representar un total de $10.4 billones de dólares en pérdidas de tiempo productivo[2].
Antes de “preocuparnos”, ocupémonos tomando previsiones para hacer, de este fenómeno, un aliado. Es importante reenfocar el tema y aceptar que el fenómeno mundialista es algo que, inevitablemente tocará a colaboradores de todos los niveles jerárquicos y áreas funcionales. Está en nosotros, en los líderes y en las áreas de gestión de personas, anotar un gol con los colaboradores, al transformarlo en una estrategia que funcione en pro de la integración, y convertir estas “pérdidas” en ganancias.
¿Qué “jugadas” podemos armar estratégicamente dentro de nuestras organizaciones?, y ¿cómo estas pueden sumar puntos en el clima laboral? A continuación, algunos ejemplos:
Jugada #1: Integrar y crear redes colaborativas.
La Copa del Mundo fomenta la cercanía entre las personas, facilitando la creación de redes informales. Una buena forma de utilizarlas a nuestro favor puede ser el establecimiento de espacios físicos dentro o fuera del horario laboral, donde las personas puedan estrechar lazos e incluso, facilitar la comunicación entre áreas funcionales que, en otro momento, puedan no tener una relación cercana, por su misma naturaleza.
Incluso, para Los Mejores Lugares para TrabajarTM, la colaboración es un área de oportunidad que ha estado presente de manera histórica[3]. En una época donde se puede percibir que el individualismo va en aumento, es un buen momento para fomentar la creación de equipos colaborativos con base en la afición mundialista, por ejemplo, para crear iniciativas como concursos de proyectos para el ahorro de costos, hackáthones, vivencia de valores, entre otros.
Jugada #2: Generar prácticas que incentiven, creativamente, el buen trabajo.
La Copa Mundial abre las puertas de la creatividad, y nos ofrece una temática original y fácilmente a la que nos podemos relacionar. Existen organizaciones que aprovechan este momento, que sólo se da cada 4 años, para desarrollar campañas de incentivos, por ejemplo, en áreas comerciales, con el objetivo de alcanzar metas o aumentar las ventas, a través de la formación de equipos “mundialistas”, acumulando puntos.
Se estima que el 89% de los excelentes lugares de trabajo incentivan a las personas por logro de metas3. Las posibilidades son infinitas, la ventaja que tiene esta temática es el posicionamiento que tendrá en nuestros colaboradores, independientemente de su edad, género o nivel jerárquico.
Jugada #3: Permitir a las personas ser como son, y así reforzar la confianza.
Existen cifras que señalan que solo el 15% de los colaboradores de tiempo completo se encuentran comprometidos con su trabajo[4].En Estados Unidos, en gran parte esta percepción se da porque consideran que las organizaciones no hacen mucho por hacerlos felices[5].
El concepto de felicidad en el trabajo aún es considerado como pérdida de tiempo para muchos líderes organizacionales. Sin embargo, las estrategias encaminadas a ello tienen múltiples beneficios en las organizaciones como la creación de relaciones positivas, refuerza el mecanismo para enfrentar cambios, promueve un clima de accesibilidad y estimula la creatividad en las personas[6].
Más allá de estrategias, se trata de permitir a las personas ser quien son. En los lugares de trabajo con culturas de Alta Confianza, 87% de los colaboradores consideran que pueden tener la libertad de sentirse ellos mismos. Esto puede resultar de gran impacto, considerando que es un aspecto que demandan los colaboradores de las nuevas generaciones y que solo en Los Mejores Lugares para TrabajarTM 59% de la población es Millennial[7].
Jugada #4: Abonar al salario emocional y fomentar el compromiso.
De acuerdo con mediciones realizadas por Great Place to Work® México, 68% de las organizaciones de más de 500 colaboradores y Multinacionales cuentan con programas o políticas definidas de Salario emocional.
El salario emocional comprende de retribución no monetaria a cambio de la aportación laboral de los colaboradores, la cual puede darse a través de beneficios que satisfagan necesidades intrínsecas de las personas[8] (Gay Puyal, 2006); es decir, que cubran aspectos adicionales al salario económico y que sean importantes para el bienestar integral de los individuos, incluyendo aspectos que integran el bienestar.
Por ello, el dar oportunidad a los colaboradores de ver algunos de los partidos y participar en la fiebre mundialista, puede resultar ser una estrategia muy efectiva para incentivar el sentido de pertenencia hacia la organización, reforzando el compromiso afectivo que elcolaborador tenga hacia la organización.
Se estima que el compromiso de los colaboradores se da 4 veces más en entornos laborales que con prácticas orientadas a la calidad de vida y, al contrario, en los entornos laborales donde se dificulta sistemáticamente el balance de vida la intención de dejar la organización aumenta 11 veces más[9].
Atrévete como líder a crear estrategias que metan goles a favor de la relación con y entre los colaboradores. Estas y un sinnúmero más de estrategias que puedes desarrollar con base en las características culturales y de liderazgo que existan en la organización. Con lineamientos claros y reglas claras, la Copa Mundial puede ser un importante aliado para conectar con los colaboradores y construir puentes entre ellos.
(Jennifer Amozorrutia / Great Place to Work® México)
[1] Reporte de GlobalWebIndex (2018)
[2] THE WORLD CUP’S BAD INFLUENCE. Newsweek (2018). http://www.newsweek.com/world-cups-bad-influence-73653
[3]De acuerdo con mediciones de Great Place to Work® México, con base en la aplicación de la Encuesta de Ambiente Laboral Trust Index®
[4] State of the Global Workplace. Gallup (2017).
[5] The 2018 U.S. Workforce Report. Adecco (2018).
[6]Organizaciones divertidas, Resultados Positivos. Great Place to Work® México (2017).
[7] Great Place to Work® México (2018).
[8] Gay Puyal, F. (2006). El salario emocional, clave para reducir el estrés. Gestión Práctica de Riesgos Laborales.
[9] ESE Business School Universidad de Navarra – Edenred. (2012). Efectos de la conciliación en el compromiso, la satisfacción y el salario emocional.