Desde pequeña Carolina Milán Cuén tuvo una inclinación hacia el área de la salud. El deseo fue creciendo hasta que inició su clínica Nutr & Ejer, donde aplica sus conocimientos en nutrición y contribuye a la salud de la sociedad.
Emprender es para la nutrióloga sinónimo de liderazgo, iniciativa, innovación y creatividad. Con estos conceptos conjugados se cumplen sueños, se les inyecta pasión y se termina con tener la satisfacción de lograr metas.
¿Cómo descubriste tu vocación?
Desde pequeña tuve una inclinación hacia el área de la salud gracias a mi familia, y así fue creciendo el deseo de aportar a la sociedad mis conocimientos en la Nutrición que es un área poco explotada en Sinaloa.
¿Cómo defines el éxito?
El triunfo o la consecución de los objetivos planeados. Es cuestión personal, porque los objetivos y las metas dependen de las motivaciones, intereses, principios y valores propios de cada individuo. El camino del éxito inicia con nuestra capacidad, continúa con la remuneración y termina con el reconocimiento, que da la satisfacción de una meta alcanzada y la motivación para aceptar el próximo reto.
¿Cuál fue el error del que has obtenido el aprendizaje más importante?
No los puedo contar como errores si no como pruebas que se presentan a lo largo de mi desarrollo para una vez que las supere obtener un aprendizaje.
Si volvieras a empezar, ¿Cambiarías algo de tu vida profesional?
No, cada paso que he dado en mi desarrollo ha sido muy pensado y acertado.
¿Qué habilidades o competencias crees que debe tener un emprendedor?
Liderazgo, Iniciativa, Innovación, Creatividad, Paciencia, Tolerancia, Comunicación asertiva, Negociación y trabajo en equipo.