Desde el inicio del año el Servicio de Administración Tributaria (SAT) activó el Régimen Simplificado de Confianza (RESICO) cuyo objetivo es simplificar el pago de impuestos y sustituir en algún momento el Régimen de Incorporación Fiscal (RIF) que funciona desde 2014 y aunque el cambio podría ser recomendable, existen ventajas y desventajas que obligan a evaluar el caso de cada empresa para saber si es conveniente el cambio a RESICO.
La Dra. Rosa Sumaya Tostado, Coordinadora de la Licenciatura en Contador Público Internacional de CETYS en Tijuana, indicó entre las principales promesas del nuevo régimen son: que es ideal para personas físicas con ingresos que no excedan de 3.5 millones de pesos en el ejercicio inmediato anterior, así solo pagarían un Impuesto Sobre la Renta (ISR) de 1 a 2.5%, para así incentivar que los negocios informales cumplan con las obligaciones y lograr mayor recaudación, pero hay “letras pequeñas” que considerar dependiendo de la empresa.
Y en el caso de las personas morales que no hayan excedido de 35 millones de pesos en el ejercicio inmediato anterior y cumplan ciertas condiciones como ser personas morales constituidas únicamente por Personas Físicas.
“El contribuyente debe analizar su situación actual con lo que serían sus nuevas responsabilidades, en el pago de impuestos se ve menos oneroso y con menos carga administrativa, pero no sería igual para todos”, indicó la docente de CETYS Universidad.
La experta indicó que podría ser conveniente para PYMES que son personas físicas o morales, pero existen limitantes, por ejemplo para las personas morales que tengan socios accionistas en otras empresas, no podrán hacer la migración. Es conveniente para personas físicas con actividad empresarial, honorarios y arrendamiento, incluso no llevarían contabilidad electrónica (con excepción para las personas morales).
“Es necesario que cada empresa revise las características de cada uno de los métodos mencionados y que estas características no perjudiquen el manejo administrativo fiscal de las empresas y personas físicas. Y hacer un estudio previo haciendo los cálculos necesarios y las consideraciones de cada uno de ellos en particular, para cada caso empresarial”, mencionó la académica en la Escuela de Administración y Negocios en Campus Tijuana.
Si bien la oportunidad de cambiarse vence este 31 de enero, varios organismos han expuesto la migración de RIF a RESICO sin previa consulta.
En ese sentido, la Dra. Rosa Sumaya insistió en estar atentos a los anuncios oficiales en caso de que se publique una prórroga, ya que aún existen varias empresas con dudas o que no están bien informados del cambio, situación similar que se vivió cuando surgió el Régimen de Incorporación Fiscal.