“Sin el mundo árabe no habría Renacimiento en Europa”, expresó el Mtro. Emile Nucho, quien agregó que el arte y arquitectura islámicos reflejan en realidad el sincretismo de las culturas que, desde el siglo VI después de Cristo, fueron conquistando los árabes, quienes en vez de destruir las culturas conquistadas las absorbían e innovaban.
Lo anterior al presidir el conversatorio Arte y arquitectura islámicas: Unidad y diversidad, en el Museo de Arte de Sinaloa, en una actividad organizada por el Instituto Sinaloense de la Cultura, a través del MASIN, y el Seminario de Cultura Mexicana Capítulo Culiacán.
El Maestro en Estudios Islámicos, nacido en Beirut, Líbano, y radicado en Culiacán, inició su charla con una breve introducción al arte y a la cultura del islam, a partir del surgimiento de esta religión surgida en la Península Árabe, la cual considera que “Alá es bello y por tanto ama la belleza”, por lo cual toda ciencia tiene que ver con Dios.
Comentó que el arte islámico se divide en Artes mayores y Artes menores. Entre las mayores está la arquitectura, y con la explosión del Islam desde la India a España en menos de un siglo, esta cultura tomó elementos de los pueblos conquistados, a la vez innovándolos.
Apoyado en proyecciones de grandes construcciones, destacó la construcción de Mezquitas, básicas porque son los lugares donde se reza a Alá; los Jardines, que para ellos, originariamente procedentes del desierto, evocan al Paraíso; los Nosocomios porque su religión ordena cuidar de los enfermos, los ancianos y los niños huérfanos, y las Fuentes, que los gobernantes colocaban en cada esquina y que tienen relación con la necesidad de agua en el desierto.
“Con estas obras (mezquitas, jardines, nosocomios y fuentes), un gobernante garantizaba su entrada al Paraíso, más que con los palacios, que para ellos eran transitorios”, dijo.
De las Artes menores y decorativas, se refirió a los tapices, telas, la caligrafía y otras habilidades.
Comentó su convicción de que sin los árabes no hubiera habido Renacimiento en Europa, pues mientras esta duró siglos sumergida en el oscurantismo, las grandes obras del conocimiento humano fueron resguardadas por los árabes y a través del comercio fueron llegando de nuevo a Europa.
Emile Nucho ha vivido y trabajado en África, el Medio Oriente (en Líbano y Arabia Saudita), Estados Unidos, Canadá y, desde hace 16 años, en México. Es licenciado en Humanidades, y cuenta con el grado de Maestría en Estudios Islámicos por la Universidad McGill, en Montreal, Canadá.
La charla fue precedida por un breve acto de bienvenida presidido por Minerva Solano Moreno, directora del MASIN; Gilberto López Alanís, representante del Seminario de Cultura Mexicana en Culiacán y Coky Sañudo y Margarita Vélez, por la Sociedad de Amigos del MASIN.