El pasado sábado 8 de febrero, se llevó a cabo un evento gastronómico que rompió esquemas y sorprendió a los asistentes con Old Times, New Journey, organizado por Cayenna, Cocina del Mundo y el colectivo COSINAR. Esta exclusiva velada fue un festín para los asistentes y una verdadera celebración de la amistad, la creatividad y la rica tradición culinaria de la región.
Old Times, New Journey reunió a chefs de renombre, amigos de largo recorrido, que compartieron más que su talento culinario, compartieron años de experiencias, historias y la pasión por la cocina. A través de un menú cuidadosamente diseñado, los chefs ofrecieron un viaje de sabores que no solo celebraba la gastronomía local, sino también la magia de los reencuentros y la colaboración.
El evento comenzó con una entrada refrescante y llena de color, gracias a la chef Andrea Lizárraga del restaurante Nao Kitchen Bar, quien presentó un exquisito tiradito de pescado del día acompañado de sandía, pimienta rosa y lemongrass. Una combinación fresca y vibrante que dejó claro que este evento sería una verdadera fiesta para el paladar.
A continuación, Luis Osuna Vidaurri, chef y director de Cayenna, Cocina del Mundo, tomó las riendas de la cocina con una serie de creaciones que dejaron a todos maravillados. Ostiones kumamoto con salsa de mantequilla, miso y chorizo chino; taquito de carnitas de pato confitado; y pozolito de mariscos con jaiba, camarón y pulpo. Cada platillo estuvo perfectamente equilibrado, con sabores intensos que realzaban la riqueza de los ingredientes y la creatividad del chef.
El siguiente tiempo, a cargo del chef Diego Becerra de Diego’s Beach & Grill, subió la apuesta con una porchetta al hinojo rostizada a la brasa, acompañada de un jus de chiles secos sobre una cama de mil hojas de papa. El platillo, un tributo a los sabores intensos de la cocina tradicional con un toque moderno, hizo que los asistentes no pudieran evitar pedir más.
El chef Marino Maganda, de Lucciano Mar y Parrilla, cerró el bloque de los platos salados con una joya culinaria: rib eye añejado con mantequilla de su propia grasa, reducción de tomillo, puré suave de papa, espárragos asados con coles de Bruselas y champiñones toreados. Un corte perfectamente ejecutado, con una explosión de sabores que destacaba la calidad de los ingredientes y el dominio del chef en la parrilla.
Y como si fuera poco, el cierre del festín estuvo a cargo de los chefs Héctor Peniche e Ignacio Osuna, quienes deleitaron a los presentes con una serie de postres irresistibles. Peniche, de Hector’s Bistro, presentó una semiesfera de mousse de 5 especias, duraznos salteados, petit gateau de frutos rojos y chocolate blanco, y una tarta tatin de piña rostizada a la vainilla y especias. Por su parte, Osuna, de Villa Unión Brasa y Masa, regaló a los comensales mignardises que incluyeron una tarta de crema de limón con frambuesa y merengue, y pastel de chocolate, avellana y naranja. Un final dulce que cerró con broche de oro esta experiencia gastronómica.
El evento Old Times, New Journey no habría sido posible sin el apoyo de los generosos patrocinadores, entre los que se destacaron Grupo del Rincón, Nissan, Microtel Inn and Suites, Nestlé, Barón Balché, Hacienda del Marqués Parras, Segafredo, Carnes Premium XO, Santara y Cerveza artesanal Bichola, quienes creyeron en la propuesta y contribuyeron a que esta celebración fuera una experiencia inigualable.
El evento, más que una muestra de habilidad culinaria, fue un homenaje a la tradición, la innovación y la amistad. Fue una oportunidad para disfrutar no solo de la gastronomía, sino también de la creatividad y el compromiso de chefs que, más allá de sus talentos individuales, compartieron una visión común, llevar la cocina mazatleca a nuevas alturas, sin perder de vista sus raíces. Old Times, New Journey demostró, una vez más, que la cocina es un lenguaje universal que une a las personas, transforma momentos y crea recuerdos inolvidables.
Este evento dejó una huella profunda en todos los asistentes, quienes no solo saborearon platos excepcionales, sino que también vivieron una experiencia única, celebrando lo mejor de la cocina y la amistad. Sin duda, Old Times, New Journey es un evento que quedará en la memoria de quienes tuvieron el privilegio de asistir.