Con un llamado a construir un futuro más humano, la asociación civil Vida y Arte para México A.C. celebró su primera rueda de prensa, marcando el inicio formal de un proyecto que busca transformar a las nuevas generaciones a través del arte y la cultura.
Su misión, según expresó Irene Burgos, miembro fundadora, es
“acercar la experiencia del arte y la cultura a niños y jóvenes para que desarrollen habilidades para la vida, descubran oportunidades y vivan con propósito y sentido humano”.
El evento contó con la participación de figuras del ámbito cultural y educativo, entre ellos el Dr. Juan Salvador Avilés, director del Instituto Sinaloense de Cultura; integrantes del consejo de la asociación como Eva Saiz, presidenta de Vida y Arte para México; Irma Gallardo, Karely Sicairos, Perla Orrantia y Lidia Valdespino, todas ellas mujeres activas en la promoción artística y educativa; y representante de la Secretaría de Educación Pública y Cultura (SEPyC).
Durante su intervención, el Dr. Juan Avilés destacó que el arte “es un elemento que ayuda a humanizar la sociedad”, citando a Bertolt Brecht: “quienes estudian arte tal vez no se conviertan en artistas, pero sí en buenos ciudadanos”. Señaló también la importancia de sumar esfuerzos entre instituciones públicas, iniciativa privada y sociedad civil para generar espacios culturales que fomenten la empatía y la creatividad en la niñez.
Integrantes de la asociación subrayó que la labor de Vida y Arte para México se enmarca en un contexto donde la sociedad civil debe asumir un papel activo.
“En México existen más de 40 mil asociaciones civiles registradas, pero sólo unas 10 mil están activas. Necesitamos más organizaciones que impulsen causas sociales, culturales y educativas que transformen realidades”, indica Irene Burgos.
Uno de los programas emblemáticos presentados fue Coros Escolares, una iniciativa que lleva la música directamente a las aulas de educación básica. A través de la formación de docentes en dirección coral, se busca que los niños vivan el arte desde su entorno escolar. Actualmente ya se encuentran activos 18 coros infantiles en distintas escuelas del estado, con la participación de más de 70 maestros capacitados.
La maestra Perla Orrantia, soprano, directora coral y formadora del programa, relató que
“el arte fue al encuentro del niño. Ya no depende de que los padres puedan llevarlos a clases externas. Ahora la música llega a su escuela, a su vida cotidiana. Es ahí donde ocurre la transformación”.
Asimismo, la asociación anunció su próxima producción de ópera infantil Pinocho, en colaboración con el Instituto Sinaloense de Cultura, con tres funciones programadas para febrero, una de ellas gratuita para mil niños de escuelas públicas.
El proyecto también contempla programas de lectura, teatro y apreciación musical, todos orientados a promover la formación integral y el desarrollo emocional de la niñez y la juventud.
“Donde hay arte, hay vida. Donde hay vida, hay futuro”, expresaron los fundadores al cierre de la rueda de prensa, invitando a la sociedad a sumarse a esta causa que busca un México más sensible, empático y libre de violencia.
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