“En mi administración estamos trabajando para que los sudcalifornianos alcancen su pleno desarrollo y amplio bienestar, queremos que Baja California Sur logre lo que está llamado a ser, una tierra próspera y exitosa”, indicó el gobernador, Carlos Mendoza Davis, luego de entregar obra educativa, urbana y de vivienda, durante una gira de trabajo por el municipio de Comondú, con una inversión superior a los 90 millones de pesos.
Acompañado del alcalde Francisco Pelayo Covarrubias, el jefe del Ejecutivo inauguró la remodelación total e instalación de techumbre de la plaza pública de Puerto San Carlos, donde enfatizó ante los comundeños su compromiso de continuar dotando de espacios de calidad que contribuyan a establecer una sociedad sana y unida.
En esa misma localidad, otorgó apoyos del Programa de Vivienda, consistentes en 80 unidades habitacionales; y posteriormente 18 más en Ciudad Insurgentes, acciones que, dijo, no solo aseguran una mejor calidad de vida para las familias, sino que garantizan su progreso.
Señaló que impulsar una educación de excelencia es fundamental para que la niñez y la juventud obtengan un mejor futuro, razón por la cual es indispensable contar con instalaciones escolares dignas. Esto, al entregar los trabajos de rehabilitación del Jardín de Niños Carmen Serdán, en Ciudad Constitución.
“Cuando nos une el propósito de resolverle los problemas y sus necesidades a la población, no existen diferencias que importen. Por ello, cuando se trata de nuestra gente, los tres niveles de gobierno estamos en un mismo equipo, y seguiremos trabajando juntos para que los beneficios se multipliquen y se sientan los resultados. El mejor futuro necesariamente tiene que pasar por escuchar la voz de la ciudadanía”, añadió el mandatario.
Como parte de esta jornada, Mendoza Davis inauguró la pavimentación de las calles Cuauhtémoc y Antonio Álvarez Rico, en la colonia San Martín; así como la avenida Jesús Menchaca, en su tramo Niños Héroes a Álvarez Rico, ambas en Ciudad Constitución.
Ahí retiró que estas obras abonan a la seguridad, a mejores servicios públicos de agua potable y alumbrado, además de incrementar el valor del patrimonio de las familias y optimizar la movilidad tanto de las personas con discapacidad como de quienes diariamente hacen uso de esas vialidades.