Lomelí Salsas surge en la infancia de Luis Fernando Lomelí Salazar cuando su abuelita les preparaba una salsa a base de chile de árbol, receta familiar que ha trascendido durante generaciones y con la cual se enseñó a comer picante. Salsa que jamás debía faltar en su mesa.
Con ganas de empezar a emprender y con el ejemplo de sus padres en tener su negocio propio, Lomelí Salazar le propone a su abuelita empezar a producirla para que las demás familias pudieran disfrutarlas al igual que ellos.
Su abuela, Aida Murillo Gastélum acepta y es aquí cuando deciden llevarla a la comercialización, con productos naturales y sin saborizantes artificiales, y crean una salsa artesanal que poco a poco busca madurar comercialmente y llegar así a todas los mesas de las familias sinaloenses.