Invitado hace tres años a participar en Nissan Sonora, en donde emprendió un proceso de institucionalizar los procesos administrativos y hacer un cambio cultural para trabajar bajo tres principios: orden, control y rentabilidad. Rubén García Villarreal dirige la sucursal Nissan Gran Auto por buen camino y en breve prevé llegar a los objetivos trazados.
Honradez, justicia, honestidad y lealtad, son valores con los que el gerente general de sucursal Nissan Gran Auto de Nissauto Sonora se rige tanto profesionalmente como personalmente.
¿Cuál es el mayor reto que has enfrentado en el corporativo?
Mi mayor reto en esta empresa es aprender de la industria automotriz, ya que nunca había trabajado en ella, la parte operativa es muy diferente a otras y tiene muchas situaciones muy específicas que hay que aprender porque son varios negocios en uno mismo: venta de autos nuevos, venta de autos seminuevos, servicio, refacciones y carrocería.
La única forma de aprender es “vivir” la operación, así que con la ayuda de colaboradores de las diferentes áreas del negocio fui aprendiendo como se opera cada uno de los negocios, metiéndome a la sala de ventas, al almacén de refacciones, al taller de servicio y al de carrocería, para entender bien el negocio.
¿Qué retos te presentó la pandemia?
La pandemia representó como en muchos de los negocios que reciben clientes en sus instalaciones, un reto mayor.
Lo primero que hizo la empresa al día siguiente que se anunció la pandemia fue crear un comité de contingencia en el cual participé activamente. Dicho comité se encargó de dictar las reglas sobre cómo afrontaríamos algo desconocido para todos.
En la parte comercial detonamos el tema digital utilizando las redes sociales para llegar a nuestros clientes de autos nuevos, seminuevos y refacciones, en servicio sanitizando las unidades al llegar, mientras se trabajaba en ellas y al entregarlas, incluso ofrecimos el servicio de ir por la unidad, hacer el servicio y entregarla en el domicilio.
Todo lo aprendido nos fortaleció como negocio y nos dio nuevas oportunidades de llegar a los clientes.
¿Cuáles deben de ser las características que debe de tener un buen directivo?
Un buen directivo primero que nada debe tener claro los objetivos del negocio, conocer muy bien su operación e identificar los indicadores clave que le ayudarán a saber si las estrategias y decisiones que se toman están dando resultados y están encaminadas a cumplir con los objetivos planteados.
Para llevar a cabo lo anterior, un buen directivo tiene que tener la habilidad de formar un equipo de trabajo que ejecute la operación con excelencia, enfocado en resultados y siempre buscando cómo mejorar.
#RETOS
Aprender de la industria
Rubén García reconoce que ingresar en la industria automotriz conlleva un costo implícito para los directivos, que consiste en recorrer todas las áreas para entender como se opera, “la parte operativa es muy diferente a otras (empresas) y tiene muchas situaciones muy específicas que hay que aprender porque son varios negocios en uno mismo”.
Rubén García Villarreal
Libro favorito: Once Anillos: El Alma del Éxito de Phil Jackson.
Frase favorita: Lo único constante es el cambio.
Tres palabras que le describan: Asertivo, Metódico, Resolutivo.
Cómo define el éxito: Lograr mis metas profesionales y personales mejorando el entorno de quienes me rodean.