Más allá del orgullo de ser una empresa sinaloense, es un honor para Tonicol pertenecer al pueblo mágico de El Rosario, Sinaloa. Con más de 70 años de trayectoria, aunque desde 1880 ya existía la fórmula, ha logrado crear una simbiosis en la historia del pueblo. Demostrando así, que en el estado se pueden hacer emprendimientos de manera honesta, con calidad y con compromiso de crecimiento para su gente.
La historia de Tonicol inicia cuando Ángel Solorza González fusiona dos pequeñas embotelladoras del Rosario, Sinaloa: “La Azteca” y “La Eureka”. Siendo en 1947 cuando se crea El Manantial.
Hoy dirigido por la tercera generación, Tobías Lozano Solorza al frente de innovación y tecnología, el corporativo y su bebida estrella; Tonicol, han logrado convertirse en una empresa icónica de México.
Refresco sano
Tonicol, quien empezó en un pequeño pueblo, hoy se ha convertido en una bebida icónica que ha logrado adaptarse a las necesidades del mercado. Claro ejemplo es su evolución más radical, cambiar sus azúcares y endulzarse con ingredientes naturales, no calóricos. Lo que les ha permitido ofrecer un producto más saludable y adaptado a las nuevas tendencias del consumidor.