La expansión de Smurfit Westrock en Baja California refleja no solo una apuesta por la infraestructura, sino también una visión de largo plazo impulsada por el crecimiento del sector agrícola en el noroeste del país y el sur de Estados Unidos. La compañía prepara una inversión para ampliar en 300 mil pies cuadrados una de sus plantas en Mexicali, lo que permitirá integrar entre tres y cuatro nuevas troqueladoras.
Enrique Miranda, director comercial en Mexicali, ha sido parte fundamental del crecimiento regional de Smurfit Westrock. Con casi tres décadas en la empresa, ha sido testigo del paso de un simple centro de distribución a una operación con plantas propias, procesos de conversión de hoja y producción de empaques terminados.
Bajo su liderazgo, la firma no solo ha consolidado su presencia en Baja California, sino que ha ampliado su alcance hacia otras regiones clave. Actualmente, las plantas en Mexicali cuentan con alrededor de 700 colaboradores y las de Tijuana suman unos 600 empleados distribuidos en cuatro instalaciones especializadas. También se evalúan mejoras en Tijuana y Ensenada para optimizar procesos y fortalecer su participación en el mercado norteamericano.
La reciente fusión global entre Smurfit Kappa y Westrock ha dado paso a un grupo con fuerte presencia en Europa y América, con más de 250 plantas en operación. En esta nueva etapa, Enrique Miranda y su equipo juegan un rol estratégico en un entorno fronterizo cada vez más dinámico, reafirmando la importancia de la región como plataforma de crecimiento.
