Fundación Borges Coppel inauguró su primer sede de Casa Paloma en Tijuana, una casa hogar con capacidad de albergar hasta 50 niños y niñas menores de 12 años, mientras el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Baja California soluciona su situación legal para su reintegración, ya sea con su familia de origen, extensa o adoptiva.
Este proyecto es resultado del trabajo conjunto con el Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) Baja California y el gobierno del estado, esta nueva casa hogar ofrecerá resguardo a menores de hasta 12 años que han sido víctimas de violencia o abandono, mientras se define su situación legal.
“Estamos muy contentos de inaugurar la primera sede de Casa Paloma en Tijuana, una ciudad que nos ha recibido con los brazos abiertos. Este proyecto representa un sueño que ha estado en mi corazón durante 20 años: construir un hogar para aquellas niñas y niños que lo necesitan. Ha sido un camino largo, lleno de obstáculos que han requerido paciencia y resiliencia, sin embargo, hemos logrado crear un espacio lleno de amor en cada rincón” Presidenta y fundadora de Fundación Borges Coppel y de Casa Paloma, Cecilia Coppel Calvo
La ceremonia de inauguración de Casa Paloma Tijuana, fue encabezada por la presidenta del DIF Baja California, la Dra. Mavis Olmeda García. La casa hogar será operada por la Congregación de Madres Misioneras Franciscanas de Guadalupe.
Actualmente se cuenta con tres opciones para que los menores puedan ser reintegrados: regresar con su familia de origen si es que cambiaron las condiciones por las que inicialmente les fue retirada la custodia; otorgar una tutoría temporal a su familia extensa que la conforman sus familiares cercanos; o que sea una familia adoptiva la que obtenga la custodia.
Este modelo será replicado próximamente en Culiacán, Sinaloa y se contempla abrir otros centros en diversas ciudades del país.
Este centro da continuidad al esfuerzo iniciado por Fundación Borges Coppel hace más de 50 años manteniendo su misión de brindar cuidado cariñoso y respetuoso a las niñas y niños en condiciones de vulnerabilidad.